lunes, 7 de noviembre de 2016

TEMA 5

TEMA 5. LOS DOMINIOS CLIMÁTICOS EN ESPAÑA
1.      LOS FUNDAMENTOS DE LA DIVERSIDAD CLIMÁTICA ESPAÑOLA

La variedad climática en España viene determinada por una serie de hechos derivados de su posición latitudinal, su situación estratégica, el carácter peninsular e insular de su territorio y por las peculiares características del mismo. Entre estos hechos hay que destacar:
La localización. España se localiza en el centro de la zona templada del Hemisferio Norte. Ello hace que -salvo uno- sus climas pertenezcan al grupo de los templados. Estos se reparten entre dos dominios climáticos esenciales: el templado-cálido o mediterráneo y el templado-frío u oceánico.
También la localización determina la existencia de una clara sucesión estacional, lo cual se traduce en notables diferencias térmicas –que explican la, a veces, acusada oscilación térmica- y pluviométricas entre las distintas épocas del año.
Situación. Su situación entre dos mares de características térmicas muy distintas y entre dos continentes, la convierten en una encrucijada de masas de aire distintas. En este sentido el territorio español queda afectado por distintos centros de acción y masas de aire, pero sobre todo por las altas presiones subtropicales (Anticiclón de las Azores) y las bajas presiones subpolares. El choque de las masas de aire tropical marítimo y polar marítimo, que envían unas y otras, crea el Frente Polar, que es impulsado hacia la Península por los vientos permanentes del Oeste.
Esto, junto a las ondulaciones de la corriente en Chorro que determinan los desplazamientos latitudinales de las células de presión, son determinantes para entender las variaciones meteorológicas que están en la base de los climas.
El carácter peninsular de España determina que el efecto suavizador de los mares se deje notar en toda la amplitud de nuestras costas. Sin embargo, el carácter macizo y poco recortado de la Península hace que el efecto suavizador de los mares no afecte de manera notable a la zona interior.
La disposición periférica del relieve hace que éste actúe de muralla que impide la penetración hacia el interior de la influencia marítima, hecho especialmente acusado en el bloque de la Meseta.
El papel de barrera del relieve se acentúa en sentido norte-sur dada la dominante dirección longitudinal de muchas de nuestras cordilleras. En este sentido, la ausencia de barreras hacia el oeste facilita la entrada de aire marítimo procedente del Atlántico, pero debido al carácter macizo de la Península esta influencia se degrada rápidamente hacia el interior aumentando la continentalidad. Estos hechos explican que el clima oceánico se limite a la franja septentrional de la Península o que en el interior encontremos climas con claros rasgos continentales y zonas de acusada aridez.
Por otro lado, la disposición de la Cordillera Costero Catalana, del sector más oriental de la Ibérica y las Subbéticas, así como el trazado paralelo a la costa de la Penibética, delimitan claramente el área de influencia directa del clima mediterráneo marítimo en sus distintas variedades.
España tiene una elevada altura media, lo que hace que en una gran parte del territorio se modifiquen las temperaturas. Además, la presencia de importantes cadenas montañosas determina la existencia de climas de montaña.
La ubicación muy meridional de Canarias incrementa la variedad climática española al introducir un clima de carácter subtropical.
Todos estos factores geográficos propician una gran variedad climática reflejada en la existencia de cuatro dominios: oceánico, mediterráneo, subtropical y de montaña, pero que alberga numerosos tipos y subtipos, entre los que algunos autores señalan climas continentales. Existen además, numerosos ejemplos de climas locales.
Y los contrastes se dejan también notar en cualquiera de los factores del clima: temperaturas (inviernos fríos o muy suaves, veranos frescos o muy calurosos, oscilaciones térmicas moderadas o extremas…), precipitaciones (una España húmeda frente a otra seca e incluso subdesértica), vientos dominantes, insolación…
2.      PRINCIPALES TIPOS DE CLIMAS Y SUS CARACTERÍSTICAS
Como antes quedó señalado, la variedad climática en España nos permite hablar de la existencia de cuatro dominios climáticos: los dos más importantes son el templado-cálido o mediterráneo y el templado frío. La diferencia entre ambos podemos situarla en los 15ºC de temperatura media anual. A los anteriores se pueden añadir el subtropical canario y el frío de montaña.

El dominio templado-frío, acoge:
-Clima oceánico o atlántico. Lo fundamental en él es el efecto suavizador del mar.
Se localiza en la fachada atlántica gallega y cantábrica, adentrándose hacia el interior hasta la parte norte del Macizo Galaico-Leonés y la Cordillera Cantábrica e introduciéndose hacia el este hasta los Pirineos occidentales.
Sus temperaturas medias anuales son suaves en verano e invierno: oscilan entre 13 y 15ºC. Así, muestra una reducida amplitud térmica por la llegada de masas de aire marítimo a estas zonas, por lo que los veranos son frescos y los inviernos templados.
Las precipitaciones anuales son siempre superiores a 800 mm y bien distribuidas. Aún así, en verano se aprecia una clara reducción pluviométrica. La nubosidad es elevada y, por tanto, el grado de insolación bajo. El clima tiene un elevado grado de humedad relativa y bajo de evapotranspiración por lo que encontramos un paisaje muy verde.
-Clima continental.
 En principio hay que aclarar que no todos los autores admiten la existencia de este clima en España. Para muchos sería más correcto hablar de clima mediterráneo con invierno frío o incluso clima mediterráneo continentalizado.
Se extiende por la España interior: Meseta, Depresión del Ebro y parte de la del Guadalquivir. Representa así dos tercios de la Península.
Los inviernos son ya fríos, y alto el riesgo de heladas y nieblas en las cuencas interiores. Por contra los veranos son largos y muy calurosos. En consecuencia la amplitud térmica es muy elevada.
Las precipitaciones son débiles e irregulares, menores a 600 mm y descienden de N a S y de W a E. Los inviernos pueden ser secos y los veranos favorecen las precipitaciones tormentosas, aunque en ellos se produce una acusada sequía.
La causa de esto es la disminución de la influencia marítima por la lejanía del mar o la obstaculización por las montañas.
El dominio templado cálido
-Clima mediterráneo. Se localiza en la zona costera mediterránea, Baleares, Ceuta, Melilla, una parte de la Depresión del Guadalquivir.
Caracterizado por inviernos templados y húmedos y veranos largos, muy secos y calurosos.
Las temperaturas medias anuales son suaves, por encima de los 15ºC. Las invernales son suaves pero los veranos son largos y calurosos, por ello, la amplitud térmica es media o media-fuerte, puede llegar incluso a los 20ºC en el interior.
Las precipitaciones son escasas e irregulares, es un clima seco. Estas oscilan entre 300 y 750mm, concentradas en otoño e invierno, produciéndose una acusada aridez estival. La irregularidad interanual determina la existencia de fase periódicas de sequía.
Dominio subtropical
-Clima canario. En Canarias encontramos un clima subtropical marítimo por:
·La cercanía del archipiélago al Trópico, por lo que queda bajo la influencia del anticiclón de las Azores, provocando tiempo estable y cálido. Además, la influencia de los vientos Alisios aportan humedad.
·La configuración del relieve, que permite la existencia de una banda entre los 600 y 1200 m donde los vientos húmedos proporcionan humedad constante.
·La proximidad a África que favorece un tiempo muy caluroso con presencia de calima.
·La corriente fría de Canarias, responsable de que las temperaturas sean menores que las que les corresponden por latitud.
Dominio frío
-Clima de montaña. Clima azonal cuyas características las determina la altura, orientación y exposición a los vientos dominantes.
Es frío y húmedo, propio de zonas de más de 1000-1200 metros de altitud. Sus inviernos son fríos y largos, sus veranos frescos y cortos. La oscilación térmica es media y las precipitaciones abundantes –lluvias orográficas- tanto líquidas como semisólidas.
3.      LA DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA DE LOS CLIMAS DE ESPAÑA
3.1. El dominio templado-frío
3.1.1.      Clima oceánico o atlántico, con dos tipos:
-Oceánico puro o marítimo.
Localización: zonas costeras de Galicia, Asturias, Cantabria y el País Vasco.
Temperaturas suaves, medias anuales entre 11 y 15ºC. Los veranos son frescos, los inviernos suaves y templados por lo que la oscilación térmica es media baja.
Precipitaciones abundantes y regulares superiores a 1000 mm anuales debido al paso de borrascas atlánticas y la cercanía de la cordillera Cantábrica. No hay estación seca pero sí una disminución estival.
-Oceánico de transición.
Localización: interior de Galicia, franja sur de la Cordillera Cantábrica y Pirineos Axiales, entre Asturias y Lérida.
Inviernos suaves acercándose a fríos y veranos con medias que pueden superar los 22ºC, así, la amplitud térmica se ve incrementada.
Precipitaciones entre los 800 y 1000mm, se reducen por el efecto barrera de la Cordillera Cantábrica. Se acentúa la reducción estival, se pueden dar meses secos.
3.1.2.      Clima continental
Algunos autores no admiten su existencia en España y lo califican de un tipo de mediterráneo de interior o continentalizado.
3.2.           El dominio templado-cálido: Clima mediterráneo, presenta varios subtipos:
3.2.1.     Mediterráneo marítimo
Localización: costas mediterráneas peninsulares salvo las alicantinas, murcianas y almerienses, Baleares, Ceuta, Melilla y una zona de las costas de Huelva y Cádiz.
Los inviernos son suaves y los veranos calurosos. La temperatura media anual es superior a 15ºC y la amplitud térmica de 12-16ºC.
Precipitaciones muy irregulares, disminuyen de N a S y de W a E, así, la aridez estival aumenta.
En la costa levantina se producen situaciones de Gota Fría, precipitaciones otoñales torrenciales.
·       Mediterráneo Catalán
Desde Gerona hasta el norte de Tarragona, entre la costa y la Cordillera Prelitoral Catalana. Roza el invierno frío y los veranos son menos calurosos y más cortos que en el resto de los tipos mediterráneos. Las precipitaciones son más elevadas, produciéndose aridez estival uno o dos meses.
·       Mediterráneo puro
Desde Tarragona al centro de Alicante y el archipiélago Balear. Los inviernos son templados y cortos, los veranos calurosos (25ºC de media). Las precipitaciones disminuyen de N a S, entre 500 y 300 mm, son irregulares con máximos en otoño. En situaciones de gota fría son tormentosas.
·       Mediterráneo andaluz
En el litoral mediterráneo de Cádiz, Málaga, Granada y parte de Almería; la llanura litoral atlántica gaditana y onubense, y una zona suroeste sevillana.
Temperaturas más elevadas (18ºC de media), veranos largos y calurosos, inviernos muy suaves (10ºC de media). La zona costera de Málaga, Granada y Almería presenta características subtropicales. Las precipitaciones están por debajo de los 500 mm, así, los veranos son secos y áridos.
·       Ceuta y Melilla
Temperaturas más elevadas que el Mediterráneo andaluz, precipitaciones medias menores a 400-500 mm, así, los veranos son muy secos.
3.2.2.     Mediterráneo continentalizado o de interior
·       Mediterráneo de interior de la Submeseta norte
Como es una zona alejada de la influencia marítima encontramos unos inviernos largos y fríos con frecuentes heladas, mínimas de hasta -20ºC. Los veranos son cortos y no muy calurosos. Las precipitaciones son escasas, -500mm, encontramos aridez estival.
·       Mediterráneo de interior de la Submeseta sur
Está más abierto a la influencia marítima. Los inviernos son menos fríos y más cortos, los veranos largos y calurosos con medias que superan a veces los 25ºC. Las precipitaciones son menores que las anteriores y la aridez estival más acusada.
·       Mediterráneo del interior del Valle del Ebro
Zona aislada de la influencia marítima con veranos más calurosos que los de la submeseta norte e inviernos fríos, así, la amplitud térmica es de 18ºC. Las precipitaciones, a veces, no superan los 300mm.
·       Mediterráneo del Valle del Guadalquivir
Veranos largos y muy calurosos, aquí es donde se alcanzan las máximas absolutas peninsulares (50ºC). Los inviernos son suaves con medias entre 10-8ºC.
3.2.3.     Mediterráneo árido
Se localiza en el SE, en la costa desde el sur alicantino hasta el levante almeriense.
Es la zona más seca de la península con totales anuales, a veces, inferiores a 300 mm, cuyos valores mínimos se alcanzan en el Cabo de Gata. La aridez ocupa 9 o más meses y las precipitaciones se relacionan con situaciones de gota fría. Los inviernos son suaves y los veranos largos y calurosos.
3.3.           Dominio subtropical. El clima canario
Definido por temperaturas suaves todo el año con medias en torno a 20ºC por lo que la amplitud térmica es muy reducida (7º-8ºC). Las precipitaciones son reducidas e irregulares, disminuyen de N a S y de W a E. Así, aumentan también con la altitud y podemos encontrar el fenómeno llamado mar de nubes, acumulación horizontal de estas entre 500 y 1500 m, causada por los vientos húmedos alisios.
3.4.           Dominio frío. Clima de montaña
Se localiza en zonas de montaña.
Su temperatura media anual es menor de 10ºC, podemos hablar de inviernos largos y fríos y veranos cortos y frescos o inexistentes. La latitud matiza las temperaturas, en el norte, este clima se da por encima de los 1000m, en el centro y sur, a partir de 2000m donde los veranos son algo más largos. La amplitud térmica es media, a veces alta.
Las precipitaciones son elevadas por el efecto orográfico, a menudo, son en forma de nieve, aún así, en algunas zonas pueden darse 1 o 2 meses secos.





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