martes, 7 de marzo de 2017

Prácticas temas 13 y 14

PRÁCTICA 1
El mapa representa los usos del suelo agrario. Analícelo y conteste las cuestiones siguientes:  
a   a) Nombre todas las provincias que tienen una mayor aportación ganadera 

b   b) ¿Qué relaciones pueden existir entre el uso ganadero y las condiciones naturales de España?
c) Comente los elementos predominantes en los paisajes de las áreas con mayor aportación agrícola. Enumérelos y distíngalos.


a) La Coruña, Lugo, Orense, Pontevedra, Asturias, Cantabria, Vizcaya, Guipúzcoa, Lérida, Gerona, Barcelona, Tarragona, Segovia y Madrid
b) Las áreas de mayor aportación ganadera corresponden al norte y noreste peninsular. Se trata de una ganadería vacuna extensiva o mixta, destinada a la producción de carne y leche, que pasta en praderas y pastizales propios del clima oceánico de la España húmeda. Aquí, la ganadería se ve favorecida por las lluvias abundantes y regulares, que permiten la presencia prolongada de prados naturales. También el relieve es un elemento favorecedor, tanto por su clima húmedo como porque las condiciones orográficas y la mala calidad de los suelos, al dificultar la agricultura, favorecen indirectamente la actividad ganadera.
En los sistemas montañosos ubicados en el área de clima mediterráneo, especialmente en los de la mitad sur peninsular, los pastizales tienen menor extensión y se reducen al fondo de los valles y otras zonas húmedas, por lo que no favorecen el desarrollo ganadero.
También existen pastizales en las penillanuras zamorana-salmantina y extremeña, además de Sierra Morena, donde el roquedo silíceo del antiguo zócalo paleozoico da lugar a suelos pobres, dedicados en gran parte a dehesas de encinas y pastizales. En relación con ello se desarrolla una ganadería extensiva o mixta de ovino, porcino y, en menor medida, vacuno.
La presencia de las provincias catalanas- sobre todo Barcelona- y de Madrid entre las zonas de mayor aportación ganadera se debe, más que a las condiciones naturales, a la producción intensiva e industrial destinada a la gran demanda de los mercados de sus áreas metropolitanas.
c)  Los elementos predominantes en los paisajes con mayor aportación agrícola son:
1.     Las zonas en las que predomina una mayor aportación agrícola son: el cuadrante nororiental de la submeseta norte, el valle alto del Ebro, las comunidades valenciana, murciana, andaluza y canaria, y la mitad oriental de la submeseta sur.
2.     Relieve: topografía de terrenos fundamentalmente llanos, penillanuras, cuencas y depresiones, además de llanuras costeras.
3.     Clima: Todas las zonas tienen en común su pertenencia a la España mediterránea seca, de ahí que se alternen cultivos de secano con otros de regadío.
4.     Suelos: La agricultura ocupa preferentemente los suelos de la Iberia arcillosa sedimentaria muy aptos para esta actividad (valles del Ebro y del Guadalquivir –campiña-, levante peninsular y submesetas) y en menor medida suelos calizos (aptos para el olivar). En ocasiones los suelos presentan un elevado grado de erosión por la intensa explotación y el uso de malas prácticas agrícolas (salinización por exceso de riego, quema de rastrojos…)
5.     Vegetación: se trata de zonas en las que se ha sustituido por completo la cubierta vegetal original por las especies de cultivo, buscando optimizar económicamente el uso del suelo.
6.     Paisajes: Son muy variados, presentándose tanto los sistemas extensivos de secano y regadío como los intensivos. Merecen mención especial las zonas de regadío, que han ido ganando extensión hasta convertirse en uno de los principales soportes de la agricultura española. Destacan las zonas de espacios ocupados por cultivos forzados (invernadero, bajo plástico, enarenados…), entre las que merecen ser citadas las del sureste peninsular.
7.     Propiedad de la tierra: aunque con excepciones, es en estas zonas en las que encontramos la mayor concentración de latifundios de España, sin faltar (zona levantina) la pequeña propiedad vinculada a la agricultura hortofrutícola intensiva.
8.     Poblamiento: del  mismo modo, es en estas zonas donde nos encontramos con la mayor representación de poblamiento concentrado de nuestro país.
PRÁCTICA 2
El mapa representa la distribución de los diferentes paisajes agrarios de España. Analícelo y responda a las siguientes preguntas:


a) ¿Qué provincias están ocupadas, en todo o en parte, por los sistemas agrarios propios de la España Húmeda?
b) Comente cuáles son las características del medio físico de la zona anterior, cuáles son los usos del suelo en ella dominantes, sus principales cultivos y aprovechamientos y sus paisajes agrarios dominantes
c) A  la vista de la información del mapa comente las características generales de los sistemas y paisajes agrarios del resto del sector costero español y de la Andalucía bética.




a) Coruña, Lugo, Orense, Pontevedra, Asturias, León, Zamora, Santander, Palencia, Burgos, Álava, Vizcaya, Guipúzcoa y Navarra
b) En esta zona el medio físico está caracterizado por un relieve montañoso -con pocas llanuras- y un clima atlántico: temperaturas suaves y abundantes precipitaciones. Todo ello favorece el desarrollo de los bosques y los prados, que son el soporte de unos paisajes agrarios basados en la especialización ganadera y forestal.
Por eso, los usos del suelo son primordialmente ganaderos, a base de ganado vacuno orientado a la producción de leche y, en segundo término, carne. En Galicia son explotaciones de tipo familiar, poco rentables, pero en el resto de la vertiente cantábrica se han modernizado desde nuestra entrada en la U.E.
Los cultivos más importantes en esta zona son maíz, patata, hortalizas, frutales, vid y plantas forrajeras para el ganado, explotados en régimen de policultivo tradicional.
La explotación forestal es importante y se destina fundamentalmente a la madera y pasta de papel.
Los paisajes agrarios presentan una estructura caracterizada por el dominio de pequeñas propiedades, explotadas en régimen directo, muy parceladas y cercadas por setos (paisaje de bocage), lo que dificulta la mecanización y -por lo tanto- la rentabilidad. Además domina un poblamiento disperso o intercalar a partir de caseríos, aldeas, parroquias y pueblos.
c) La zona referida ocuparía Baleares, la franja litoral mediterránea (hasta los relieves interiores), la costa atlántica andaluza y la depresión del Guadalquivir. Físicamente es un espacio de tierras llanas, con un clima de inviernos suaves, veranos calurosos y reducidas precipitaciones.
En buena parte de la costa encontramos un espacio caracterizado por el desarrollo de una agricultura intensiva de alta productividad, que coexiste con actividades no agrarias, especialmente vinculadas al turismo.
El paisaje rural se caracteriza por una población numerosa, tradicionalmente dispersa en la zona de Levante, mientras que en el valle del Guadalquivir aparecen grandes pueblos o agrociudades.
Domina la pequeña propiedad en la costa y en las zonas regadas, mientras que en el secano pueden ser propiedades pequeñas o medianas en Valencia, Murcia, Cataluña y Andalucía oriental, y grandes en la occidental.
En  este dominio de las vegas y huertas mediterráneas y campiñas andaluzas distinguimos tres zonas:
Cataluña. Acoge una agricultura intensiva y especializada orientada al mercado, basada en los cultivos hortofrutícolas y la vid, y una ganadería estabulada e industrial (porcino, vacuno). En el delta del Ebro destaca el cultivo del arroz.
El levante acoge un regadío intensivo –derivado de la huerta tradicional- de elevados rendimientos, donde junto a los productos hortícolas destacan los cítricos y los frutales.
La Andalucía litoral alberga algunos de los mejores ejemplos de agricultura intensiva española: cultivos de enarenados bajo plásticos en Almería, subtropicales (Granada y Málaga) o fresa en Huelva. Por su parte, las campiñas béticas comparten, en un marco de gran propiedad, hábitat muy concentrado y suelos –a veces- de gran calidad (bujeos), el uso cerealista con el girasol y otras plantas industriales, sin faltar el olivar que, no obstante, tiene en las subbéticas su espacio de natural desarrollo.


PRÁCTICA 3
En el mapa aparecen señaladas las distintas regiones pesqueras españolas. Obsérvalas y contesta:
a) Señala el nombre –acompañado de su número- de las regiones pesqueras identificadas con los números del 1 al 6. Diga el nombre de las provincias que forman parte de las regiones 1, 3 y 8 y el de las comunidades a las que afectan las números 3 y 4.
b) ¿Cuál es la región pesquera más importante en función de sus capturas y tamaño de la flota? Además, enumera las características de las dos regiones pesqueras más meridionales de España
c) ¿Cuáles son los problemas actuales de la flota pesquera en España? ¿Qué soluciones pueden tener?
d) Cita el nombre de las principales artes pesqueras que se utilizan en España. ¿Cuáles son las más dañinas para el medio marino y por qué?

a)  1: Noroeste  2: Cantábrica  3: Tramontana  4: Levantina  5: Surmediterránea  6: Suratlántica
1: Pontevedra, Coruña y Lugo  3: Gerona, Barcelona, Tarragona; Castellón y Valencia
8: Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria // Cataluña; C. Valenciana; Murcia y Andalucía
b) La Noroeste. Región Sur-atlántica. Coincide con el litoral atlántico andaluz (Cádiz y Huelva). Se caracteriza por la importancia de su pesca de bajura, por lo que está presente el carácter artesanal de la flota y un gran arraigo social. Ha sufrido una gran disminución, sobre todo, a raíz de que España no renovara los acuerdos pesqueros con Marruecos, ya que parte de su flota faenaba especialmente en el banco sahariano, obteniendo especies de alta cotización económica (gambas, langostinos, calamar). Aquí también ha cobrado una gran importancia la acuicultura.
Región Canaria. Tuvo su época dorada en la década de los setenta y ochenta, pero el cierre del banco subsahariano le ha privado de sus caladeros internacionales y ha convertido sus puertos en base de operaciones del resto de la flota española en el Atlántico sur. Se dedica principalmente a la pesca de altura y gran altura. Sobresale el puerto de Las Palmas, el tercero de todo el país en importancia.
c) El problema de los caladeros. Los nacionales presentan dos problemas naturales y otro de agotamiento. Por un lado ofrecen modestos recursos debido a que la plataforma continental es reducida y además están muy contaminados, por otro lado están agotados o esquilmados por sobrepesca.
En cuanto a los caladeros internacionales, los de la C.E. están sometidos a sistemas de licencias y cuotas para asegurar la sostenibilidad de las capturas. Los demás o se han ido cerrando a la flota española por falta de acuerdos o se localizan a enormes distancias, lo que reduce la rentabilidad de la actividad.
 Los problemas estructurales de la pesca.
·        La población activa va disminuyendo y sufre un problema de envejecimiento. La disminución se debe a la pérdida de actividad por el agotamiento de los caladeros, la crisis artesanal, la mecanización del trabajo y la reducción de licencias. El envejecimiento afecta a la mayoría de los activos artesanales.
·        La flota pesquera está sobredimensionada, un excesivo número de embarcaciones son de pequeño tonelaje y poseen anticuadas tecnologías, no pueden alejarse de la costa y contribuyen al agotamiento de los caladeros nacionales
Los problemas medioambientales.
Se deben principalmente a la sobreexplotación de los recursos, bien por sobrepesca, bien por la utilización de artes muy agresivas que dañan los fondos marinos y, por consiguiente, los recursos; pero se debe también a la contaminación de las aguas por vertidos agrarios, urbanos, industriales, mareas negras… El Mediterráneo es un mar especialmente contaminado.
d) Las más usadas son el palangre, el cerco, el trasmallo y el arrastre. Las más dañinas son el arrastre, ya que daña los fondos marinos (algas y otros organismos) y el trasmallo, pues además de peces atrapa mamíferos marinos, tortugas y aves que, al no poder emerger para respirar, mueren en las redes. Especialmente problemáticas son las redes de deriva.
PRÁCTICA 4
(Sobre el mismo mapa que la práctica 3)


En el mapa aparecen señaladas las distintas regiones pesqueras españolas. Obsérvalas y contesta a las siguientes cuestiones:
a) Señala el nombre –acompañado de su número- de las regiones pesqueras identificadas con los números del 1 al 6. Diga, además, el nombre de las provincias que forman parte de las regiones 2, 3 y 4 y el de las comunidades a las que afectan las números 1, 2, 3 y 4.
b.- Compara (similitudes y diferencias) la región del suratlántica con la del noroeste
c).- ¿Cuáles son las principales especies capturadas y en qué volumen?
d).- Explica las causas que han estado en la base del desarrollo de la acuicultura en España
a) 1: Noroeste  2: Cantábrica  3: Tramontana  4: Levantina  5: Surmediterránea  6: Suratlántica
2: Asturias, Cantabria, Vizcaya y Guipúzcoa; 3: Gerona, Barcelona, Tarragona, Castellón, Valencia, Alicante, Murcia y una parte de Almería
1: Galicia  2: Asturias, Cantabria y País Vasco  3: Cataluña y Comunidad Valenciana  4: Murcia y Andalucía
b.- Región Noroeste. Es la más importante de España, tanto por volumen de capturas como por flota (casi el 50% del total de barcos), aunque ha seguido una evolución paralela a la española, con una reducción notable en ambos conceptos. Su flota de altura pesca en caladeros comunitarios del Atlántico norte y en aguas muy alejadas. También es importante la acuicultura centrada en el mejillón y otros crustáceos.
Región Sur-atlántica. Coincide con el litoral atlántico andaluz (Cádiz y Huelva). Posee la segunda flota más numerosa después de la región noroeste. Se caracteriza por la importancia de su pesca de bajura, por tanto domina el carácter artesanal de su flota. Como en Galicia, la pesca tiene aquí un gran arraigo social. También ha sufrido una gran disminución, sobre todo, a raíz de que España no renovara los acuerdos pesqueros con Marruecos, ya que parte de su flota faenaba en el banco subsahariano, obteniendo especies de alta cotización económica (gambas, langostinos, calamar). Aquí también ha cobrado una gran importancia la acuicultura.
c).- El 90% de las especies capturadas son peces; el resto son moluscos y crustáceos. Hay que destacar dentro de los peces al pescado blanco (merluza y pescadilla) y las sardinas, las anchoas, el atún y el bonito. El volumen de pesca desembarcada se ha visto reducido espectacularmente en los últimos años. Así, en 2006 la producción pesquera se limitaba a 750.000 toneladas (92% de peces, 6% moluscos y un 2% de crustáceos y otras especies)
Esta reducción explica que España haya pasado, de ser exportador de pescado a ser importador, tanto para el consumo diario como para satisfacer la demanda de las industrias transformadoras y conserveras.
d).- La principal está en la propia crisis de la actividad pesquera. En la década de los 70 España creó una gran flota con la pretensión de conformar una verdadera potencia pesquera apoyada en una fuerte demanda, unos precios del carburante barato y una legislación internacional flexible. En la década de los setenta y ochenta las circunstancias variaron radicalmente y sumieron al sector en una gran crisis.
La sobreexplotación pesquera y la contaminación, especialmente en el Mediterráneo, han llevado al agotamiento de los caladeros nacionales y a una fuerte crisis en la pesca artesanal de bajura. Además, hemos perdido el acceso a caladeros tradicionales como el subsahariano, el de Terranova o el de Boston, y la U.E. nos está sometiendo a una importante limitación de licencias de barcos y capturas totales.
La propia Unión Europea obligó a España a llevar a cabo un ajuste estructural de su flota, que consistió en reconvertirla y modernizarla. Se pretendía reducir el número de embarcaciones (subvención del desguace de barcos), crear empresas pesqueras conjuntas con otros países y, en general, renovar y modernizar la flota pesquera.
Ante la crisis del sector pesquero había dos soluciones: la sustitución del puesto de trabajo en el mar por otro como  el turismo o la reconversión del sector a la vez que se potenciaba el desarrollo de otras actividades en las zonas afectadas por la reconversión. Por eso, con fondos estructurales de la U.E. se concedieron ayudas para diversificar la actividad económica, y una de las más favorecidas fue el desarrollo de los cultivos marinos (acuicultura) y la investigación para la obtención de nuevos recursos del mar.
PRÁCTICA 5
(Sobre el mismo mapa que la práctica 3)


a) a1) Señala el nombre –acompañado de su número- de las regiones pesqueras identificadas con los números del 1 al 6. a2) Diga el nombre de las provincias que forman parte de las regiones 1, 3, 5 y 8. a3) Diga el nombre de las comunidades a las que afectan los números 2 y 4.
b) ¿Qué factores explican la mayor importancia de las regiones pesqueras del noroeste y cantábrica respecto a las Mediterráneas?
A) a1) 1: Noroeste  2: Cantábrica  3: Tramontana  4: Levantina  5: Surmediterránea  6: Suratlántica
     a2) 1: Pontevedra, Coruña y Lugo  3: Gerona, Barcelona, Tarragona, Castellón y Valencia
            5: Almería, Granada y Málaga  8: Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria
     a3) 2: Asturias, Cantabria y País Vasco   4: Comunidad Valenciana, Murcia y Andalucía.
 
B) Este hecho viene explicado por factores físicos, económicos, sociales y políticos.
Factores Físicos: Las regiones pesqueras del norte presentan mejores condiciones físicas que las mediterráneas. En ambos casos encontramos el problema de la estrechez de la plataforma continental, pero la plataforma norte de la Península Ibérica presenta particularidades que aumentan sus índices de biodiversidad, concediéndole importantes pesquerías. Así, presenta una plataforma muy estrecha (20-40 km), un talud abrupto, cañones submarinos muy encajonados… Además, estamos en un mar de transición entre los mares fríos del norte y los templados subtropicales; y las corrientes dominantes del Cantábrico suelen venir del W cargadas de nutrientes aportados por el afloramiento de aguas profundas en Galicia.
Al contrario, el Mediterráneo es un mar cerrado, más cálido y más contaminado por el alto grado de urbanización de su cuenca. Esto se traduce en una importante producción de residuos. Además hay que considerar la reducida llegada de nutrientes a sus aguas, debido a la escasez de ríos caudalosos.
También la localización influye desde el punto de vista geo-económico, sobre todo desde nuestro ingreso en la C.E. y la ampliación de las aguas jurisdiccionales a 200 millas. Así, las flotas del norte quedan más próximas a los caladeros de Gran Sol y Atlántico Norte, Groenlandia y Terranova y tienen menos problemas con la jurisdiccionalidad de las aguas con sus vecinos.
Lo contrario ocurre en la zona mediterránea: Sus pesquerías están muy esquilmadas, los caladeros más cercanos son los del problemático banco sahariano y se encuentra más alejada de otros caladeros internacionales, lo que supone un aumento de costes para acceder a ellos.
Factores económicos.  Otra de las razones está, tanto en el grado de desarrollo económico de ambas zonas como en la existencia de más o menos recursos sustitutivos. Así, la zona norte, sobre todo Galicia, ha tenido tradicionalmente un escaso grado de desarrollo económico, que la ha obligado a aprovechar al máximo sus recursos marinos. Asturias y País Vasco han sido zonas de temprana industrialización, pero la crisis de la minería asturiana y la industria pesada vasca, volvieron a impulsar tanto la actividad pesquera como la industria de conservas de pescado, tradicional en la zona y fuente de riqueza.
Muy distinta es la situación en el Mediterráneo. El desarrollo industrial (Barcelona, Valencia…), el impulso de la agricultura intensiva de regadío, la actividad comercial ligada a importantes puertos, el notable grado de urbanización y, sobre todo, el importante desarrollo del turismo costero, ligado a su vez a la construcción, han generado yacimientos de empleo y competido con el sector pesquero que ha quedado muy debilitado.
Factores sociales. La debilidad económica de las zonas interiores de muchas provincias del norte ha generado importantes movimientos migratorios con dirección a las zonas costeras, donde la actividad pesquera y sus industrias auxiliares ofrecían mayores posibilidades de empleo. Ello queda claro en Galicia con el especial desarrollo de la fachada atlántica en contraste con el interior. Esta zona se ha visto favorecida, además, con el desarrollo de la acuicultura marina en la zona de las rías.
Incluso el sistema de ciudades del norte, donde el eje cantábrico, debilitado por el declive minero-industrial-, las dificultades de conexión con las redes vecinas y la pervivencia de numerosos núcleos de pequeño y medio tamaño en la costa, han favorecido el mantenimiento de la actividad pesquera.
Factores políticos. El impulso político a la industria naval en el norte (Galicia, País Vasco) ha favorecido tradicionalmente la creación y mantenimiento de una importante flota pesquera que está también en la base de la importancia del sector.

jueves, 2 de marzo de 2017

TEMA 14: LA PESCA EN ESPAÑA

TEMA 14. LA ACTIVIDAD PESQUERA EN ESPAÑA
1. SIGNIFICADO DE LA PESCA EN ESPAÑA
1.1. Importancia del sector
La aportación del sector pesquero al PIB roza el 1% del total, aunque su importancia es mayor que lo que indica esa cifra, ya que: ·Tenemos la cuarta flota pesquera del mundo ·Una gran demanda de pescado, propia de un país católico y costero. ·La actividad pesquera influye sobre un sector amplio que incluye astilleros, fábricas de conservas, de instrumental, de hielo, el sector de los transportes, los mercados...
Además el sector pesquero se concentra en determinadas zonas donde actúa como actividad de monocultivo, donde poseen un arraigo social y económico muy importante.
1.2. Recursos materiales y humanos: flota, artes y población.
La estructura de la actividad pesquera viene dada por la población empleada en el sector y por las características de la flota pesquera.
1.2.1 Población.  La población activa ocupada en la pesca era del 0,7% del total en el año 2006 (poco más de 50.000 empleos) y se define por su disminución y envejecimiento. La disminución se debe a la crisis del sector, que ha llevado a la reducción de la flota y a la mecanización del trabajo.  El envejecimiento afecta a la mayoría de la población que trabaja la flota artesanal.             
1.2.2. Flota y artes.  La flota se caracteriza por su dualidad y su excesivo tamaño. Existe, por un lado una flota artesanal, poco competitiva y de bajura, pero, por otro, tenemos una flota de altura muy competitiva y moderna. El excesivo tamaño deriva del crecimiento desmesurado en la década de los sesenta, con unos precios del petróleo muy baratos y libre acceso a las aguas internacionales.
Con la crisis del petróleo y la nueva legislación internacional ese modelo entró en crisis dejando a la flota española con un excesivo número de barcos. A finales de 2013 se superaban los 10.000, de los que el 80% correspondían a pequeñas embarcaciones. Del total de la flota casi la mitad correspondía a Galicia.
En cuanto a las artes, las más utilizadas son el arrastre, el palangre, el trasmallo y el cerco.
ARRASTRE: Consiste fundamentalmente en el empleo de una red lastrada que barre el fondo de la mar capturando todo lo que encuentra a su paso. Se suele considerar como una práctica muy destructiva para el ecosistema, ya que destruye las algas y otros organismos.
PALANGRE: Consiste en una línea única y principal ramificada con líneas de anzuelos conectadas a ella.
TRASMALLO. Se lleva a cabo con grandes redes rectangulares de tres paños (el central más tupido) que se anclan con pesos en el fondo marino o flotan libremente en la columna de agua, llamándose entonces redes de deriva. Los peces entran en la red y quedan enganchados en la malla por las branquias.
CERCO. Consiste en cercar el pescado. Una vez localizado el banco de peces, se procede a cercarlo, soltando la red y extendiéndola en círculo con una lancha pequeña de gran motor. Seguidamente se cierra el fondo de la red capturando la pesca.
En algunas zonas como Cádiz se siguen utilizando artes muy tradicionales como la de la Almadraba.
1.3. Especies capturadas y volúmenes.
1.3.1. Especies capturadas. El 90% de las especies capturadas son peces; el resto son moluscos y crustáceos. Destacar dentro de los peces la merluza, pescadilla, sardinas, anchoas, atún y bonito.
1.3.2. Volúmenes. En 1980, la producción pesquera de España ascendía a 1,15 millones de toneladas. Sin embargo, el volumen de pesca desembarcada se ha visto reducido espectacularmente, debido a las nuevas circunstancias (agotamiento de caladeros internos, prohibición y limitación de los exteriores,...). Así, en 2006 la producción pesquera se había reducido a 0,75 millones de toneladas.
Esta reducción explica que España haya pasado, de ser exportador de pescado a ser importador, tanto para el consumo diario como para satisfacer la demanda de las industrias transformadoras y conserveras.
1.4. Problemática del sector
La actividad pesquera atraviesa una situación de crisis, que se refleja en algunos indicadores:
·        El descenso de la población activa ocupada en el sector.
  • La disminución de su contribución directa al PIB.
·        El carácter deficitario de la balanza exterior pesquera: importamos más de lo que vendemos.
Esta crisis viene determinada por los tres siguiente problemas:
Ø  El problema de los caladeros
·        Los caladeros nacionales ofrecen modestos recursos debido a que la plataforma continental es reducida y además están muy agotados o esquilmados por sobrepesca.
·        Los comunitarios están sometidos a sistemas de licencias y cuotas para asegurar la sostenibilidad de las capturas. Además, algunos se han cerrando a la flota española por falta de acuerdos.
Ø   Los problemas estructurales de la pesca.
·        La población activa dedicada al sector ha disminuido debido al agotamiento de los caladeros, la crisis de la flota artesanal, la mecanización del trabajo y la reducción de licencias.
·        La flota pesquera está sobredimensionada, muchos barcos son de poco tonelaje y poseen anticuadas tecnologías, no pueden alejarse de la costa y contribuyen al agotamiento de los caladeros nacionales
Ø  Los problemas medioambientales.
Se deben principalmente a la sobreexplotación de los recursos, bien por sobrepesca, bien por la utilización de artes muy agresivas que dañan los fondos marinos y, por consiguiente, los recursos; pero se debe también a la contaminación de las aguas por vertidos agrarios, urbanos, industriales, mareas negras...
2. REGIONES PESQUERAS Y PRINCIPALES CALADEROS EN ESPAÑA
  2.1. Regiones pesqueras en España. España se encuentra organizada en ocho regiones pesqueras. Cuatro corresponden al Atlántico-Cantábrico: noroeste, cantábrica, suratlántica y canaria y las otras cuatro al Mediterráneo: Tramontana, levantina, surmediterránea y balear. La más importante por sus capturas es la del noroeste, seguida de las otras regiones atlánticas.
Litoral Atlántico.
2.1.1. Región Noroeste. Se corresponde con la región pesquera más importante de España: Galicia, tanto por volumen de capturas como por flota (casi el 50% del total). Su flota de altura pesca en caladeros comunitarios del Atlántico norte y en aguas muy alejadas. Destaca el puerto de Vigo. También es importante la acuicultura centrada en el mejillón y otros crustáceos.
2.1.2. Cantábrica. La constituyen Asturias, Cantabria y el País Vasco. Es la segunda más importante por el volumen de pesca capturada y la tercera en valor económico. Destacan los puertos de Gijón, Pasajes y Bermeo. Especies principales: atún, sardina, caballa, bacalao.
2.1.3. Región Sur-atlántica. Coincide con el litoral atlántico andaluz (Cádiz y Huelva). Se caracteriza por la importancia de su flota artesanal de bajura, que cuenta en algunas zonas con un gran arraigo social. Ha sufrido una gran disminución por los problemas a la hora de renovar los acuerdos pesqueros con Marruecos, ya que parte de su flota faenaba en el banco sahariano, obteniendo especies de alta cotización económica (gambas, langostinos). Aquí también ha cobrado una gran importancia la acuicultura.
2.1.4. Región Canaria. Tuvo su época dorada en la década de los setenta y ochenta, pero el cierre del banco subsahariano le ha privado de sus caladeros tradicionales. Hoy sus puertos son base de operaciones del resto de la flota española en el Atlántico sur. Se dedica principalmente a la pesca de altura y gran altura. Sobresale el puerto de Las Palmas, el tercero de todo el país en importancia.
Litoral mediterráneo.
          Tiene menos importancia que Atlántico y Cantábrico. Su caída se debe a la sobreexplotación y contaminación del litoral, aunque todavía son importantes las capturas de sardinas, besugo, rape... La flota está obsoleta y predomina la pesca de bajura y artesanal. El litoral mediterráneo incluye cuatro regiones:
2.1.5. La tramontana. Desde la frontera francesa hasta el cabo de la Nao: Cataluña y la Comunidad Valenciana. Puertos que destacan Barcelona y Tarragona.
2.1.6. Levante. Desde el Cabo de la Nao al Cabo de Gata (Alicante, Murcia y una parte de la costa de Almería). Puertos más importantes: Santa Pola y Alicante.
2.1.7. Surmediterránea. Corresponde a la costa mediterránea andaluza: Parte de Almería, Granada y Málaga. Su actividad es muy reducida respecto al pasado. Destacan los puertos de Almería, Adra y Málaga.
2.1.8. Baleares. En la actualidad ha disminuido mucho la actividad pesquera, llegando incluso a importar pescado. Destaca el Puerto de Palma de Mallorca.
2.2. Caladeros
2.2.1. Caladeros nacionales          
 Los caladeros nacionales no ofrecen abundantes recursos pesqueros porque la plataforma continental es reducida y la sobrepesca, debida a la demanda creciente de pescado, ha provocado su agotamiento. En ellos se practica una pesca litoral o de bajura, cercana a la costa, que utiliza todo tipo de artes. La flota es principalmente artesanal, en pequeñas embarcaciones de menos de 20 toneladas de registro bruto.
2.2.2. Caladeros internacionales
 Las escasas posibilidades de los caladeros nacionales y el gran tamaño de la flota, obliga a buscar caladeros en aguas libres o en zonas económicas exclusivas de otros países, de los que proceden las 2/3 partes de la pesa desembarcada. Los principales caladeros ajenos están en el Atlántico y en el Índico occidental. En ellos se practica la pesca de altura y gran altura con una flota que puede permanecer durante meses en alta mar.
3. IMPORTANCIA CRECIENTE DE LA ACUICULTURA EN ESPAÑA
3.1. Definición. Se denomina acuicultura al cultivo de peces, moluscos y crustáceos en piscifactorías o bateas flotantes. Actualmente produce más de 360.000 toneladas anuales, sobre todo en las mismas áreas en las que destaca la actividad pesquera (Galicia, Andalucía y Canarias).
3.2. Causas. La principal está en la propia crisis de la actividad pesquera. En la década de los 70 España creó una gran flota, apoyada en una fuerte demanda, unos precios del carburante barato y una legislación internacional flexible. En la década de los setenta y ochenta las circunstancias variaron radicalmente y sumieron al sector en una gran crisis.
La sobreexplotación pesquera y la contaminación, especialmente en el Mediterráneo, han llevado al agotamiento de los caladeros nacionales y a una fuerte crisis en la pesca artesanal de bajura. Además, hemos perdido el acceso a caladeros tradicionales como el subsahariano, Terranova o Boston, y la U.E. nos está sometiendo a una importante limitación de licencias de barcos y capturas.
La propia U.E. obligó a España a un ajuste estructural de su flota, que consistió en reconvertirla y modernizarla. Se pretendía reducir el número de embarcaciones (subvención del desguace de barcos), modernizarla y crear empresas pesqueras conjuntas con otros países.
Ante la crisis había que reconvertir el sector y potenciar el desarrollo de otras actividades que creasen empleo en las zonas afectadas por la reconversión. Por eso, con fondos estructurales de la U.E. se concedieron ayudas para diversificar la actividad económica, y una de las más favorecidas la acuicultura.
3.3. Desarrollo de la acuicultura en España.
El futuro de la pesca parece estar en la acuicultura. La continua reducción de las capturas mundiales hará cada vez más rentable el establecimiento de estas granjas del mar, que aumentarán su producción y variedad como alternativa para satisfacer la alta demanda del mercado español. España cuenta con unas condiciones favorables: costas extensas y variadas; clima apropiado; y posibilidad de explotar especies que garanticen alta rentabilidad. Por ello está siendo impulsada, tanto desde España (Ley de Aprovechamiento de cultivos Marinos), como desde la U.E., que aporta fondos para la creación de infraestructuras y la incorporación de trabajadores del sector pesquero tradicional.
La acuicultura de agua dulce cuenta con más de 2000 piscifactorías, dedicadas a la cría de peces para consumo humano (trucha) en Galicia, Cataluña y ambas Castillas; cría de crustáceos (cangrejos rojos, camarones) en las marismas del Guadalquivir y Doñana; y producción de peces para repoblación. El problema principal es el continuo crecimiento de los costes de producción, que no puede solventarse con un incremento del precio del producto debido al exceso de oferta y la competencia internacional.
La acuicultura marina se orienta principalmente a los moluscos, sobre todo el mejillón, que se concentra en Galicia; en cantidad menor se cultivan ostras en Cataluña y almejas. Entre los peces destacan la lubina, la dorada y el rodaballo.