TEMA 4. CARACTERIZACIÓN GENERAL DEL
CLIMA EN ESPAÑA
1. Los condicionantes básicos.
Tanto si hablamos de tiempo atmosférico como de
clima nos referimos a las condiciones de la atmósfera, que puede definirse como
la capa gaseosa que envuelve a la Tierra, siendo la troposfera su parte más
cercana a la superficie y donde se
producen los fenómenos meteorológicos y climáticos. Entre sus características
más importantes podemos citar cuatro:
a) Contiene vapor
de agua, fundamental para fenómenos como la humedad o las precipitaciones.
b) En ella la temperatura
es variable en función de la latitud, la estación del año o la altura.
c) Es la zona más densa de la atmósfera y donde más
importantes son los cambios de presión
del aire
d) Distintas zonas de presión generan los vientos, responsables del movimiento de
las masas de aire.
Entre los condicionantes básicos de los climas
debemos estudiar los siguientes:
1.1.
La temperatura. Es consecuencia directa del Sol y sus
radiaciones y está en continuo cambio dependiendo de los siguientes hechos.
a) El nivel de
insolación (intensidad de las radiaciones), que se deriva de dos
circunstancias:
*El momento del año,
que a su vez determina dos fenómenos: la inclinación con que los rayos de sol
caen sobre la superficie y la duración del día. Así, a menor inclinación más
calor y viceversa. Por otra parte, se alcanzará mayor temperatura cuanto más
largo sea el día.
*El momento del día,
de forma que la temperatura es mayor
en las horas centrales del día o primeras de la tarde, ya que es entonces
cuando los rayos de sol son más perpendiculares.
b) La Latitud. A menor latitud mayor temperatura y viceversa debido
al menor o menor grado de inclinación de los rayos solares sobre la superficie
terrestre.
c) El relieve y la altura. La temperatura en la Troposfera disminuye con la
altura (media de 0,64º C cada 100 m), así, esta es un factor de disminución de
la misma. La orientación del relieve
también influye sobre ella. Así, las laderas orientadas hacia el sur (solanas) serán más cálidas y secas que
las orientadas al norte (umbrías).
d) La influencia de
los mares. Los mares suavizan las temperaturas de las zonas
litorales. Así, en verano la tierra
está más caldeada que el mar y éste absorbe
temperatura suavizando la del continente. En invierno ocurre lo contrario y son los mares los que ceden temperatura al continente
suavizándola. Por eso, las zonas que reciben la influencia marítima tendrán
menor oscilación térmica anual y
temperaturas más suaves en cualquier estación. Por contra, la ausencia de
influencia marítima –continentalidad-
dispara la oscilación entre verano e invierno.
1.2. La humedad y las precipitaciones. El aire contiene vapor de agua, es decir,
humedad. La que puede contener una masa de aire depende
de su temperatura, de forma que las masas de aire cálido admiten mayor cantidad
de vapor de agua que las frías.
La presencia de vapor de agua
aumenta el peso del aire y, por lo
tanto, su presión, de forma que
a mayor humedad mayor peso y, por tanto, mayor presión.
Otros conceptos en relación con la humedad del aire:
Nubes: Son el resultado de la condensación del
vapor de agua en la atmósfera. Pueden adoptar tres formas: Cirros, Cúmulos y
Estratos.
Niebla: Fenómeno que se produce cuando se condensa
el vapor de agua del aire en contacto con el suelo. Si la niebla es poco espesa
se habla de neblina o bruma.
La presencia de vapor de agua en un alto porcentaje y su enfriamiento son
condiciones indispensables para que se produzca la precipitación. A su vez, el
enfriamiento puede deberse a tres causas diferentes, por lo que también podemos
hablar de tres tipos diferentes de precipitación según su origen:
a) PRECIPITACIONES CONVECTIVAS.
Se producen cuando el fuerte calentamiento de la superficie transmite calor a
una masa de aire húmedo que, al calentarse, se dilata, pierde peso y comienza a
ascender rápidamente. Al elevarse se enfría, lo que conlleva una fuerte
condensación y lluvias copiosas. Este es el origen de las tormentas de verano
en zonas subtropicales.
B) PRECIPITACIONES CICLONALES O DE FRENTE. Son las que suelen provocan precipitaciones en la
zona templada por el mecanismo siguiente: Al producirse el choque de una masa
de aire frío (denso y pesado) con otra de aire cálido y húmedo (más ligero),
esta tiende a elevarse sobre la primera. A medida que asciende se va enfriando,
produciéndose la condensación y la lluvia.
enfriándose
y condensándose provocando la lluvia. Pueden ser de frente frío o cálido.
C) PRECIPITACIONES OROGRÁFICAS O DE RELIEVE. Se producen cuando una masa de aire húmedo se
encuentra con una montaña que la obliga a elevarse. Ello hace que se enfríe, se
condense la humedad y precipite en esa ladera de la montaña (Barlovento). Esa
masa de aire, ya seca, pasa al otro lado de la montaña (Sotavento), que por lo
general suele ser muy árido. Esto es lo que se llama efecto foehn.
1.3. La
dinámica atmosférica. Mecanismo que explica los movimientos de masas de aire
a escala del Planeta, determinado por las diferentes condiciones de
temperatura, presión y vientos existentes entre distintas zonas del mismo, así
como por fenómenos como la fuerza de
Coriolis.Aparecen así cinturones permanentes de presión de origen térmico o
dinámico, responsables del movimiento de las masas de aire, de los vientos
permanentes que las impulsan, etc.
España, al situarse en la zona templada,
queda afectada por dos de estos cinturones: las altas presiones subtropicales (Anticiclón Azores) y las bajas presiones subpolares. El choque
de masas de aire tropical marítimo (cálido y húmedo) y polar marítimo (frío y
húmedo), que envían unas y otras, crea el Frente
Polar, que es impulsado hacia la Península por los vientos permanentes del Oeste que se generan entre ambos
cinturones. En altura coinciden con la CORRIENTE EN CHORRO (JET STREAM).
1.4 Presión y vientos. La presión es
el peso que el aire ejerce sobre la superficie terrestre o cualquier punto de
la atmósfera. Depende de las características de temperatura y humedad del aire.
Así, a mayor temperatura menor presión y viceversa, y, a mayor humedad mayor
presión y viceversa. Además, la presión se modifica con la altura, de forma que
irá disminuyendo a medida que subamos en altura.
La presión se mide en milibares (mb) o hectopascales
(hP). La normal estaría en torno a 1012 mb o hP. Por encima hablaríamos de altas presiones o anticiclones. Por
debajo de bajas presiones o borrascas.
Los anticiclones provocan tiempo seco y estable, las borrascas tiempo variable,
a veces ligado a precipitaciones.
Los centros de presión son también responsables de los
vientos permanentes. Así, los anticiclones expulsan vientos y las
borrascas los absorben. Por tanto, circulan desde zonas de altas presiones
hacia las de bajas presiones, siendo más fuertes cuanto mayor es la diferencia
de presión (gradiente de presión)
Por otra parte, la fuerza de Coriolis determina el sentido de circulación de los
vientos alrededor de anticiclones y borrascas: Estos giran en el sentido de las
agujas del reloj en torno a los anticiclones del hemisferio norte y en sentido
contrario en torno a sus borrascas.
1.4. Otros condicionantes básicos del clima. Entre ellos podemos destacar los siguientes:
La insolación
o cantidad de radiación solar directa que recibe una unidad de superficie
horizontal. Está directamente relacionada con la duración del día a lo largo
del año pero inversamente con la nubosidad, es decir, a mayor nubosidad, menor
insolación.
La
evapotranspiración. Proceso de traspaso de agua de la superficie terrestre
a la atmósfera a partir del proceso físico de la evaporación y el biológico de
la transpiración de las plantas. Depende de la temperatura, del viento y de la
disponibilidad de agua.
La aridez. Término que alude a la situación en la que la escasez de humedad impide
mantener una densa vegetación debido a que la evaporación supera a la
precipitación.
2. Los elementos climáticos y su distribución espacial.
Los elementos del clima son circunstancias
ambientales que pueden observarse, describirse y medirse: temperatura, precipitación,
presión, velocidad, y dirección del viento, insolación…Sin embargo, la
climatología se ha basado principalmente en dos de ellos: precipitaciones y
temperaturas.
2.1. Las precipitaciones.
Distribución espacial.
Las precipitaciones
presentan en la Península las siguientes características
generales:
*La media
anual está en unos 650 mm anuales
pero con grandes diferencias en su
distribución.
*En
general disminuyen de norte a sur y de este a oeste.
*Los máximos
de precipitación se dan en Galicia,
costa cantábrica y algunos sistemas montañosos. Los mínimos en Canarias y el sureste peninsular.
A partir del mapa
pluviométrico, en el que la distribución de las precipitaciones se hace
mediante isoyetas, se distinguen
tres grandes franjas, que corresponden a
la España húmeda, la seca y la
árida.
A. La España húmeda. recibe precipitaciones anuales superiores a los 800 mm. Incluye el
noroeste y norte peninsular: una franja continua desde Galicia hasta el norte
de Cataluña, acogiendo también sus zonas montañosas: Macizo Galaico-Leonés,
Cord. Cantábrica y Pirineos. Causas
de la elevada pluviometría de estas áreas: 1º
Están muy expuestas a las borrascas asociadas a los frentes atlánticos. 2º. El relieve.
Fuera
de estas áreas sólo algunos
puntos aislados pertenecen a la España Húmeda, siendo siempre la altitud la causa fundamental, por
lo que se trata de áreas montañosas: zonas de la Ibérica y sectores de las
Béticas, destacando la Sierra de
Grazalema.
B. La España seca. Precipitaciones
entre 300 y 800 mm anuales; abarca
casi las ¾ partes del territorio. Incluye ambas submesetas, valles del Ebro y
Guadalquivir, zonas de Levante y Cataluña, y ambos archipiélagos. Las causas de la disminución de las
precipitaciones son el debilitamiento de
los frentes atlánticos hacia el interior y el efecto barrera provocado por la disposición del relieve.
C- La España árida. Se corresponde
con las zonas que reciben menos de 300 mm anuales, en su mayor parte en el
sureste peninsular y sur levantino, incluyendo también algunas comarcas
del interior peninsular, como el interior de Granada o el bajo Ebro. La razón
es, en unos casos, el efecto foehn.
Carácter y reparto estacional de las
precipitaciones
El carácter
de las precipitaciones cambia también según el lugar. En la España húmeda las precipitaciones caen
durante muchos días a lo largo de todo el año pero son, por lo general, finas y persistentes. En cambio, en las
zonas secas y áridas el número de
días de lluvia desciende de manera considerable pero las precipitaciones son a
menudo torrenciales.
Respecto al reparto estacional de las precipitaciones o régimen pluviométrico podemos
distinguir:
- La franja
próxima al Atlántico (sector N y W peninsular) tiene el máximo de precipitaciones en invierno.
-El interior y la mitad oriental tienen dos máximos, uno en otoño y otro en
primavera.
-Zonas muy localizadas del interior,
presentan un máximo de precipitación estival.
En cuanto a las precipitaciones en forma de nieve,
disminuyen de Norte a Sur, siendo en las costas levantinas y meridionales
prácticamente desconocidas.
Finalmente, la escasez e irregularidad de
las precipitaciones y las altas temperaturas estivales, explican la importancia
de la aridez en gran parte del
país, siendo mayor en la España árida, sobre todo en el S.E.
2.2. Las temperaturas.
Distribución espacial.
La distribución de temperaturas se ve condicionada por la
latitud, la altitud, la disposición del relieve, la influencia marítima..., que
determinan las características generales
de las temperaturas en la península:
a- Las
temperaturas aumentan en dirección norte-sur (las del N son inferiores a las
del sur)
b- Las zonas
costeras presentan unas temperaturas medias superiores al interior peninsular.
c- La temperatura
media es muy baja en las montañas.
El mapa de isotermas nos permite distinguir en la Península cuatro grandes
zonas térmicas:
· Las Costas gallegas y cantábricas, con
temperaturas medias suaves de hasta 15º
C.
· El resto del sector costero español, con
medias entre 15-18º C.
· La España interior,
con grandes diferencias térmicas, entre los 10 y los 19º C
· La alta montaña con temperaturas medias inferiores a los 10ºC.
Conclusión: Encontramos mayor amplitud térmica en el centro que en
la periferia. Las máximas amplitudes se dan en la Meseta y Valle del Ebro,
debido a la escasa influencia marítima (continentalidad). Por ello los inviernos del interior son fríos y largos,
mientras que en la periferia son suaves y cortos. Las mínimas
amplitudes se dan en zonas costeras y el archipiélago canario.
2.3. Otros elementos del clima
en España.
Insolación:
La
franja norte peninsular tiene bajos niveles de insolación que aumenta hacia el
Sur.
Vientos:
Por
su situación, la península está dentro del dominio de los vientos del oeste, aunque en la costa oriental son frecuentes los vientos de levante. Durante el verano
son frecuentes las calmas. Canarias
está bajo el dominio de los vientos alisios.
Además, existen vientos locales (cierzo, tramontana,
terral…)
Evapotranspiración:
Los
valores más altos los encontramos en la depresión del Guadalquivir. Los más
bajos en la cornisa cantábrica.
Nubosidad: La zona
cantábrica y pirenaica presenta más días cubiertos, que disminuyen de norte a
sur.
Nieblas: Son frecuentes
en invierno en los valles, altiplanicies y depresiones del interior y, sobre
todo, en zonas montañosas.
3. Los factores climáticos
en España
Pueden definirse como aquellos aspectos que
condicionan o modifican los climas. Estos se pueden
clasificar en tres grupos: Astronómicos, geográficos y termodinámicos.
1-Factores astronómicos.
La latitud. La situación de
España en la zona templada implica la existencia de una clara sucesión estacional, ligada a la
variación de duración de los días y las noches, que afecta a los niveles de
insolación.
La España
peninsular se sitúa entre los 36 y los
43º de latitud norte. Ello supone apreciables variaciones en la duración
media del día, sin olvidar la diferencia en el ángulo de incidencia de los
rayos solares en función de la latitud, que repercute en la radiación solar, siendo esta muy
favorable a las zonas meridionales de España y teniendo su máximo en el S.E.
Otro factor que
modifica el nivel de radiaciones solares es la nubosidad, mucho más abundante en el norte. La latitud es
así la principal responsable de que las temperaturas
medias aumenten de Norte a Sur.
2-Factores geográficos
*Nuestra posición entre el
Atlántico y el mediterráneo. La influencia
marítima alcanza la mayor parte de España, eso sí, con distintas intensidades
debido a que mediterráneo y Atlántico poseen temperaturas distintas por su
situación y corrientes dominantes. Así, la
corriente del Golfo hace que en el Atlántico norte las temperaturas de las
aguas superficiales sean más altas que las que les corresponderían en latitud
lo que hace que las temperaturas de la cornisa cantábrica sean más suaves de lo
normal.
En Canarias ocurre todo lo contrario en
relación con las corriente fría que
baña el archipiélago.
En el Mediterráneo
no existen corrientes que modifiquen sensiblemente el clima, dado que es un mar
pequeño y cerrado. Esto provoca el estancamiento de las masas de aire que
penetran en él, que tienden a caldearse y causar depresiones térmicas que afectan al Levante español en situaciones
de gota
fría.
*Nuestra posición entre las grandes masas continentales de Europa y
Africa. En nuestra situación el continente europeo nos
envía en invierno masas de aire frío y seco que, ocasionalmente, provocan olas
de frío. En cambio, el continente africano suele afectarnos en verano con masas
de aire cálido y seco, responsables de olas de calor que afectan más al sur
peninsular y el mediterráneo levantino.
*La forma de la península Ibérica y la disposición
del relieve. Influye sobre nuestros climas
mediante:
•El carácter macizo y poco recortado de la Península, que determina que la influencia
marítima sea muy limitada en el interior donde se acentúa el carácter
continental.
•Disposición periférica de una parte del relieve peninsular, que hace que la influencia marítima sólo afecte de manera
clara a las zonas costeras.
•Modificación por el relieve de las características de
las masas de aire por dos razones:
a) El relieve
obstaculiza la penetración de las masas de aire procedentes del exterior.
b) Modifica sus
características de temperatura y humedad de esas masas por el efecto de ascenso
y descenso impuesto por las barreras orográficas (efecto foëhn).
•Dominio de la disposición longitudinal (W-E) de
nuestras cordilleras, lo que favorece la penetración de corrientes de
procedencia atlántica y obstaculiza la entrada de corrientes de dirección
meridiana.
Sin embargo, los
rebordes montañosos orientales (Ibérica, Costero-Catalana y Béticas) suponen un
obstáculo para la penetracción de masas de aire desde el Mediterráneo.
En general, la
incidencia de masas de aire sobre las barreras montañosas provoca lluvias
orográficas, pero también un efecto foehn. Esto hace que las precipitaciones en
España disminuyan progresivamente, sobre todo de NW a SE,
•Efecto de la caída de la temperatura con la altura, un factor muy influyente teniendo en cuenta la elevada altura media de
las tierras españolas
3-Factores termodinámicos o meteorológicos
Están relacionados con la circulación general
atmosférica y son los siguientes:
3.1 -Las masas de aire: A España llegan
las masas de aire polar -siempre
frío- y ligadas a tiempo inestable; aire
ártico, asociadas a olas de frío; aire
tropical marítimo que produce tiempo estable y aire tropical continental, casi siempre asociado a olas de calor.
Además, al encontrarnos en una zona de choque de masas de aire, España se ve
afectada con frecuencia por el paso de frentes, empujados por los vientos
predominantes del Oeste.
3.2 - Los centros de acción: Las áreas de altas y bajas presiones reciben
también el nombre de centros de acción. Los anticiclones son responsables de
tiempo seco y estable. Las bajas Presiones o Borrascas producen un tiempo inestable
y lluvioso. En los mapas del tiempo los puntos de igual presión aparecen unidos
por líneas sinuosas denominadas isobaras.
Las células de presión pueden ser según su origen térmicas o dinámicas. Aquellas están originadas por las
temperaturas en superficie: anticiclones provocados por masas de aire muy frío
o borrascas causadas por aire muy caldeado. Las dinámicas están provocadas por
la circulación general atmosférica
Entre los
centros de acción que afectan a España podemos señalar:
· El anticiclón de las Azores, que suele ser
responsable de la falta de precipitaciones en España.
· El anticiclón escandinavo que nos envía
aire frío en invierno.
· El anticiclón invernal centroeuropeo,
responsable de olas de frío.
· Baja presión de Islandia: Suele
originar los frentes del W que causan precipitaciones en España.
· La baja presión de Génova, responsable de
precipitaciones en el litoral mediterráneo.
· Las bajas presiones estivales del norte de
Africa, asociadas a olas de calor.
3.3- Los frentes: España queda bajo
la influencia del frente polar
(atlántico), que separa la masa polar marítima (fría y húmeda) de la
tropical marítima (cálida y húmeda).
Este frente es el reflejo en superficie del Jet
Stream (o Corriente en Chorro) en altura.
Por el
desplazamiento de los centros de acción con las estaciones, la Península queda
bajo la influencia del aire tropical cálido en verano y del aire polar frío en
invierno, mientras que durante los equinoccios el frente polar genera sucesivas
borrascas que son impulsadas hacia España por los vientos permanentes del oeste
de latitudes medias. Este frente suele ser el responsable del tiempo variable y
lluvioso sobre España.
Si la masa de
aire cálido avanza sobre la de aire frío hablamos de FRENTE CÁLIDO. En este
caso, el aire cálido se eleva suavemente sobre el frío, por lo tanto la
condensación es más lenta, dando lugar a precipitaciones poco abundantes y
dispersas pero duraderas.
Si la masa de
aire frío avanza sobre la cálida hablamos de FRENTE FRÍO. En este caso el aire
frío, más pesado, se mete en cuña bajo el cálido y lo obliga a ascender
bruscamente, provocando una rápida condensación que es responsable de lluvias
cuantiosas (moderadas) que caen en poco tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario